Arriesgarse con apalancamiento.
- Jaime Gomez

- 6 sept 2016
- 3 Min. de lectura
“Sólo aquellos que se arriesgan a ir demasiado lejos pueden descubrir hasta donde se puede llegar”,bonita frase de T.S. Eliot, y muy acertada en estos tiempos que corren, donde quedarse quieto supone perder tiempo, dinero y oportunidades de crecimiento en muchos aspectos. Porque cuando intentamos algo apostamos por conseguirlo, y el mero hecho de movernos ya habla mucho de nosotros. Lo contrario es quedarnos quietos a contemplar lo que pasa, para terminar ser víctimas de cualquier viento que sople.

Hablando de oportunidades, de arriesgar, de moverse, hay hechos que no pueden pasarse por alto como que según el Instituto Nacional de Estadística el primer semestre de este 2.016 ha supuesto que se hayan comercializado 207.600 inmuebles, la mejor racha desde el 2.010, o que la rentabilidad media que ofrece la inversión en inmuebles se haya incrementado hasta el 6,1 %. Son datos, solo eso. Porque como digo siempre: toda empresa, negocio, sector, producto, servicio tiene un inicio, un crecimiento, y luego una caída. Todo sube y todo cae. Los famosos ciclos económicos, válidos para todo en la vida. Ahora los indicadores nos dicen que es un buen momento para invertir en vivienda. Es hora de dar un paso adelante y aprovechar el momento.
Mi deseo siempre es el mismo: “Que gente corriente pueda participar de esta gran fuente de ingresos pasivos o plusvalías que permite el sector inmobiliario, que puedas ser un empresario/emprendedor inmobiliario”; ¿por qué no? ¿Qué es lo que necesitas? efectivamente: conocimiento y acción. Las dos grandes armas para triunfar en este siglo lleno de cambios, innovaciones, oportunidades y sorpresas. El mayor riesgo es invertir sin conocimiento. Pero… ¿por qué no apalancarse en los que ya lo tienen? tú eres bueno en varias áreas, si deseas aprender otras y ser igualmente bueno tendrás que invertir miles y miles de horas. Y esto no te garantiza nada, por este motivo cualquier empresario o emprendedor sabe que el éxito está en apalancarse en personas que ya saben cómo hacerlo.
Esta es la razón por la que nacen las ONIS “Oportunidades de Negocio Inmobiliario”, donde presentamos operaciones que hacemos en inmuebles y te dejamos participar, sabiendo que gente con experiencia coordina el negocio. En definitiva te conviertes en empresario inmobiliario, pero sin los inconvenientes de tener que aprender todo lo que nos ha llevado muchos, muchos años. Es lógico, cada uno entiende de lo que sabe.
el ser humano adora lo seguro, adora lo bueno, quiere ganar y huye de lo malo, pero hoy en día lo que sirve hoy mañana no vale. Sabemos que esta película va muy deprisa, e Internet lo ha cambiado todo. Lo que es seguro ya lo sabes, solo hay dos cosas: que te vas a morir y que vas a pagar impuestos. Como todo mortal. Nos molesta perder, nos paraliza la idea de palmar dinero, o de que nos señalen como fracasado, pero es la única manera de progresar (pero teniendo antes cierta información): dando un paso adelante y confirmando que socios/mentores son los que te harán crecer. Porque todos tenemos socios o mentores, gente que te influye. A eso me refiero con el apalancamiento: o aprendes a cocinar, o dejas que otros cocinen. Pero no cualquier cocinero, sino alguien que te aporte confianza.
Y aquí es donde quiero llegar, somos muy alegres entregando nuestro dinero a negocios, bancos, o actividades en las que no tenemos el más mínimo control ni garantía, y aquí incluyo al Estado, pues pensamos que estará seguro. Pero no es así. No te dejes engañar y empieza a hacer caso a los datos, a los hechos y sobre todo a tu intuición. Es mi punto de vista nada más.



Comentarios